Durante le embarazo se pueden dar una serie de alteraciones físicas y psicológicas derivadas de la gran sobrecarga hormonal a la que está sometida nuestro cuerpo en ese momento pues, se está preparando para el parto.
Entre todas éstas que son propias de la normalidad en el embarazo, nos encontramos con las llamadas contracciones de preparación al parto o “braxton hicks” que se dan hacía el final de la gestación. Sin embargo, estas contracciones son indoloras y no deforman en ningún momento el cuello uterino.
Algo que se desvía de la normalidad sería el denominado útero irritable. Éste es el útero que durante el embarazo presenta contracciones antes de tiempo, con modificaciones en el cuello uterino y con gran peligro de parto prematuro.
Estas contracciones, propias del útero irritable, no son preparatorias al parto, no son regulares, molestan e incluso duelen y suponen un signo de alarma del que hay que informar inmediatamente al médico si crees que te está pasando. Ante la duda, siempre es mejor prevenir para poder tratarlo desde el inicio.
Causas de estas contracciones molestas durante el embarazo
Sus probables causas son deshidratación, estrés de la madre, infección urinaria, infección vaginal etc. Aunque a veces no hay causa aparente alguna y estas se dan en los consecutivos embarazos que a mujer vaya a tener.
De una manera u otra habrá que consultarlo con el médico ginecólogo para que haga las pruebas que precise, ponga tratamiento y medidas.
La exploración y las pruebas que se suelen hacer son el examen pélvico, poner el monitor fetal, mandándose en función del el momento del embarazo reposo absoluto con contraindicación de relaciones, la suministración de medicación o incluso el cerclaje del cérvix (como procedimiento quirúrgico para evitar el parto prematuro por cerviz incompetente)
Importante es recordar que ante cualquier alteración en tu embarazo deberás de informar a tu médico, no te automediques, ni te autodiagnóstiques.
El mejor tratamiento es la prevención y promoción de la salud, de aparecer cualquier problema deberá ser monitorizado y controlado por un especialista.