Con frecuencia padres e hijos deben compartir cuarto de baño. Una buena distribución será fundamental para conseguir mayor rendimiento y comodidad. La elección de materiales adecuados evitará que se convierta en una amenaza para la seguridad de los más pequeños.

Cuando en una vivienda que va a ocupar una familia con hijos, dispone de un único baño completo, hay que recurrir a estrategias y soluciones que permitan un uso simultáneo y logren lugares de almacenamiento para todos los miembros de la familia. Y todo ello, sin olvidar la seguridad.

Tabla de contenidos

¿Bañera o ducha?

La elección dependerá en gran medida de la edad de los hijos. Si estos son pequeños habrá que decantarse por una bañera. En cuanto a sus medidas tenga en cuenta debe facilitarle la tarea de bañar a sus hijos y evitar accidentes. Además, para poder entrar, salir, y secarse cómodamente es necesario dejar un espacio de 0,90 m enfrente de la bañera. Procure que la flor de la ducha se pueda adaptar a cualquier estatura, la estándar es 1.95 m. Usos simultáneos Si se trata de jóvenes o adolescentes se puede sustituir las bañeras por dos duchas de obra enfrentadas, que ocuparán el mismo espacio. Esta solución permitirá que dos personas puedan asearse al mismo tiempo. Cuando se comparte esta estancia es muy práctico realizar un muro de obra que separe visualmente el inodoro del resto del baño.

Del mismo modo, las encimeras con lavabo doble pasan de considerarse un capricho a convertirse en una necesidad. Aprovechando espacios Conocer las diferentes posibilidades de decoración puede ayudar a conseguir que el baño no parezca una habitación reducida y desordenada. Una buena iluminación y la sustitución de la cortina de ducha por una mampara contribuirán a ganar espacio, al menos visualmente. La solución más fácil y menos cara es usar el color, los espejos y los dibujos para crear sensación de amplitud. Por ejemplo, optar por pintar toda la instancia de un solo color, ayudará a evitar la disminución del espacio visual. Los calienta-toallas son un recurso muy práctico para mantener las toallas secas y ordenadas y disfrutar de una agradable temperatura. Todo en poco espacio y con un acabado muy atractivo.

¿Y el almacenamiento?

Se puede utilizar cestas de mimbre o cajas de cartón de diversos tamaños. Son muy prácticas para guardar productos del baño y al mismo tiempo contribuyen a su decoración. Realizar una especie de hornacina en el tabique y colocar en ella varias baldas dará como resultado una práctica estantería, sin quitar espacio al resto del baño. Se puede situar un banco corrido con una balda debajo, es una forma muy práctica de tener a la vez un asiento y un lugar para guardar cosas. En los baños con techos altos, utilizar ese espacio para colocar armarios o baldas, o realizar una zona oculta de almacenaje aprovechando el falso techo. El cúmulo de toallas puede encontrar solución en los modernos radiadores-toalleros; estéticos y muy prácticos. Algunas normas de seguridad El baño es un espacio atractivo para los más pequeños, les encanta apoyarse en el borde de la bañera y jugar con el agua.

Todo esto, que para ellos es sólo un juego, puede resultar peligroso. Por ello es importante que los padres tomen una serie de medidas. Casi todos optan por colocar un seguro en la puerta para mantenerla cerrada pero en muchas ocasiones esta medida es insuficiente, ya que cualquier despiste de los padres puede ser aprovechado por los más pequeños para entrar en ese “mundo prohibido” a curiosear. Otras medidas a tener en cuenta son: Poner materiales antideslizantes en las bañeras, la ducha y en la zona de salida de éstas, para evitar resbalones y prevenir caídas. Colocar asientos adaptables a la bañera y agarraderas que pueden ayudar y facilitar el baño de sus hijos. Guardar las medicinas, cosméticos así como las tijeras o máquinas de afeitar en sitio en un armario alto y preferiblemente cerrarlo bajo llave. Es preferible no situar las tomas de corriente en los bajos del baño y si es inevitable coloque dispositivos de seguridad.