Hemos oído muchas dietas que son milagrosas y te hacen perder peso rápidamente, el problema de este dietas sin ningún control médico es que igual de rápido que las pierdes las vuelves a recuperar.
No es el caso de la dieta Scardale, un dieta disociada que se basa en el consumo de más proteínas y menos azúcares. El objetivo de esta dieta es que el cuerpo consuma las reservas y así se elimina la grasa.
Además, otra diferencia de esta dieta con otras es que fue diseñada por un cardiólogo, un médico experto que diseño la manera de consumir 1000 calorías y perder de promedio medio kilo diario.
Como en todas las dietas siempre hay unas contraindicaciones y determinadas personas que no pueden hacerla, nos referimos a las embarazadas, adolescentes en edad de crecimiento o personas con problemas de salud especiales.
Fases de la dieta Scardale
Esta dieta se divide en dos fases: la primera que debe hacerse durante dos semana y la segunda es de mantenimiento.
Antes de iniciar la dieta hay que saber que entre comidas sólo se puede consumir zanahorias, no beber alcohol, la carne sin piel, y las ensaladas condimentarlas sólo con vinagre.
El la primera fase el desayuno siempre debe ser el mismo y estar compuesto de medio pomelo o fruta de temporada, café o té y una rebanada de pan de proteína. Las cenas se puede ir alternando el pescado como el atún o salmón con la carne como la hamburguesa, pollo o pavo. Además, las cenas se pueden acompañar de una ensalada. Un día a la semana se tiene que comer dos huevos acompañado de calabacín o habichuelas.
La fase de mantenimiento consiste en ampliar la lista de alimentos, muchos continúan perdiendo peso con la dieta de mantenimiento. Simplemente es comer fruta y verdura de manera variada.
Si se sigue paso a paso esta dieta y no se salta ningún paso seguro que se obtienen los resultados deseados.