¿Recuerdas lo que merendabas cuando eras pequeña a la salida del cole? Las meriendas más comunes para los niños hace unos años eran los bocadillos de fiambre o de chocolate, los batidos y los zumos. ¡Qué bueno!
A la hora de preparar la merienda para nuestros hijos hay que pensar en el menú que han comido o comerán el resto del día. Normalmente los niños son muy activos y entre todas las actividades del cole y las extra escolares gastan mucha energía que deben recuperar el resto del día. Para ellos es muy importante que hagan las cinco comidas al día para que no pasen hambre y tengan siempre la energía que necesitan.
Lo ideal es que la merienda contenga unas 220 calorías aproximadamente, es decir, que suponga un 15% del total que ingiera al día. Si conocéis la pirámide alimenticia deben de ingerir diferentes grupos de alimentos cada día.
La pirámide de los alimentos se basa en la flexibilidad y en la variedad permitiendo comer una gran variedad de alimentos dentro de cada grupo, para que cada persona ajuste la dieta a su tipo de vida. Esta pirámide es un buen patrón de base para que los niños se alimenten correctamente cada día.
Por ejemplo, si durante la mañana los niños sólo han ingerido un vaso de leche en el desayuno necesitarán tomar dos raciones más que puede ser durante la merienda, en forma de yogur, queso o un mismo vaso de leche con galletas o cereales (hidratos de carbono).
Ten en cuenta las necesidades de tu hijo/a, si consideras que tiene una época más sedentaria y que no necesita tanta energía, intenta que por las tardes consuma frutas y lácteos porque los hidratos de carbono le resultarán más pesados de digerir.
Las meriendas más saludables son las que contienen alimentos naturales y los hemos preparado en casa. Los productos ya preparados contienen un alto índice de grasas y conservantes que no son recomendables.
Los niños con problemas alimenticios es importante que acudan a su pediatra para que indique la pauta a seguir.
Algunas ideas para meriendas saludables para niños
- Zumo de naranja natural con tostadas de tomate.
- Queso batido con azúcar moreno y canela.
- Macedonia de plátano, manzana, pera, kiwi, fresa y zumo de naranja natural (para los días que hayan hecho deporte). También se le puede añadir cereales o muesli.
- Vaso de leche con galletas integrales o galletas caseras (más naturales). Aquí tienes una receta de galletas deliciosa.
- Rodajas de piña en su jugo.
- Sándwich integral de tomate, queso, jamón york y aceite de oliva.
- Yogur con cereales ya preparado o añadiéndolos en un bol en casa.
- Queso de burgos con miel.
- Vaso de leche con tostadas con mermelada.
- Batido de frutas naturales con leche (se le puede añadir galletas maría).
- Fruta natural con miel o azúcar.
- Tortilla de jamón serrano o york de un huevo con una tostada.
- Fiambres variados sin pan.
- Zumo de pera/manzana/ naranja con trocitos de fruta.
- Helado de yogurt natural con muesli/ trozos de fruta/ trozos de chocolate.
- Mini bocadillo de jamón serrano con queso.
- Tostadas con mermelada casera (ocasionalmente).
- Leche con cereales o muesli.
- Crepes salado de queso y jamón york.
- Magdalenas caseras.
- Tarta casera o bizcocho casero intentando que no tenga muchas calorías con un vaso de leche o zumo natural.