Si no cuidas tus riñones, pueden morir muy lentamente. Por eso debes mantener una dieta saludable para los riñones y limitar el consumo de agua si quieres prevenir los problemas renales. De lo contrario, puedes encontrarte con una insuficiencia renal crónica a su debido tiempo.
La mayoría de la gente piensa que la diálisis es necesaria sólo para los pacientes que padecen insuficiencia renal o avanzada y que requieren tratamientos de diálisis renal. Pero la verdad es que cualquier individuo puede sufrir una insuficiencia renal. Con la ciencia en el horizonte prometiendo tratamientos para todo tipo de problemas renales, la insuficiencia renal se está convirtiendo en un problema creciente en todo Estados Unidos y en todo el mundo.
Estos son algunos de los síntomas comúnmente aceptados de la enfermedad renal:
– Incapacidad de eliminar los fluidos urinarios. El flujo de fluidos es insoportablemente lento o incluso se detiene por completo.
– Buscar ayuda para cualquier dolencia resulta desconcertante para muchos. Buscar los signos y síntomas de la enfermedad renal es como buscar una aguja en un pajar. El paciente puede pensar simplemente que está sufriendo una infección común, pero la explicación se debilita a cada momento.
– Se presentan síntomas similares a los de la gripe o la mialgia. Esto puede ser sólo el resultado de un daño renal en la zona afectada.
– El dolor o los calambres en el bajo vientre son una clara señal de problemas. El estómago o el abdomen tienen tendencia a doler por la presión sobre las venas y las arterias.
– La orina turbia con un ligero olor a cal o azufre es otra clara indicación de que los riñones no están haciendo su trabajo correctamente.
– El dolor al orinar es otro claro indicio de que los riñones no están haciendo su trabajo correctamente; de hecho, es posible que los riñones hayan dejado de funcionar hace tiempo, lo que haría este dolor aún más insoportable.
– pronto, habrá un daño irreversible en los riñones y la insuficiencia renal será evidente.
Una vez que se manifiestan estos síntomas, es imperativo tomar medidas inmediatas para evitar daños permanentes en los riñones, los tejidos y las arterias. Si el problema se vuelve demasiado grave, no hay cura; una vez que llega demasiado lejos, realmente no hay esperanza. No hay soluciones rápidas, una vez que los riñones han sido dañados.
Afortunadamente, la acción preventiva y los ajustes en su estilo de vida pueden lograrse con bastante facilidad, prestando una cuidadosa atención a la dieta diaria, a los remedios naturales y a algunos cambios en el estilo de vida, como el aumento de la cantidad de líquido consumido diariamente. Una hidratación adecuada repondrá el agua y los electrolitos esenciales que nuestro cuerpo está diseñado para mantener durante los momentos de estrés de nuestra vida. La cantidad de agua que bebemos debe ser aproximadamente de 8 a 10 vasos diarios. Esto debería ser de dos a tres cuartos de agua, y puede incluir agua, té de hierbas o uno de los muchos zumos de frutas y verduras disponibles en el mercado. En épocas de deporte, pueden ser necesarios algunos vasos más de agua para mantener la hidratación, ya que el cuerpo utiliza más agua de lo habitual mientras se hace ejercicio.
Para gozar de buena salud es necesario restablecer la función renal normal. Si padece alguna de estas dolencias renales más comunes, consulte a su médico para que le indique cómo mantener un riñón sano.