Seamos sinceras. La historia -fundamentada en sus clichés y sus puntos de vista poco feministas- ha dejado muy de lado el papel de la mujer al frente del mundo del motor. Como ser físicamente inferior (en algunos casos, ellos tienen mayor fuerza que nosotras, en general, pero eso no impide que podamos realizar sus mismas labores),Sin embargo esta profesión sigue reclamando la atención de hombres porque se considera que sólo ellos son capaces de manipular piezas pesadas, pero a medida que pasa el tiempo ciertos estereotipos se rompen y empiezan a aparecer ideas de negocios como un taller mecanico solo para chicas en el cuales sólo trabajan mujeres reparando el coche y haciéndole mantenimiento, como el caso de GirlsAutoclinic, un taller en Estados Unidos que además, ofrece cursos para que las mujeres aprendan elementos importantes del coche y como repararlo.
Pero, no todos tenemos acceso a asistir a dichos cursos, entonces que podemos hacer si nos encontramos un día solas en medio de la carretera y pinchamos una rueda. ¿Quién va a cambiarla? Por aptitudes, tranquilas, somos más que capaces. El problema sigue residiendo en coger el gato, levantar el coche, destornillar la rueda, colocar la de repuesto y llegar hasta un punto de ayuda donde puedan socorrernos y solventar el incidente como es debido.
Más allá de los tópicos que encierra el tema, lo cierto es que las mujeres también sabemos de coches, además de los miembros de GirlsAutoclinic, son muchas las que se han hecho un hueco importante. Danica Patrick, piloto profesional en la NASCAR Sprint Cup Series. Linda Hasenfratz, directora general de Linamar, segunda mayor empresa proveedora de vehículos en Canadá. O Mary Barra, vicepresidenta ejecutiva de General Motors, quien tiene en su poder la tarea de supervisar la friolera de 11.000 millones de euros (¡quién los tuviera!), los cuales gestiona entre los 29.000 empleados de la compañía, en cinco continentes. ¿Parece que a las chicas no nos va tan mal, verdad?
Mecánica básica
Indudablemente, y llegadas a este punto, no voy a negar que todos -hombres y mujeres-, somos aptos para tener el control sobre cualquier campo del sector. Más allá de cargos administrativos, también sabemos ensuciarnos las manos cuando es necesario, sólo que quizás a veces nos falta algo de información y práctica para demostrarlo y salir airosas de muchas situaciones. Por ello, a continuación, os dejamos un par de consejos (los más comunes y que más olvidamos) para que os ayuden a terminar de entender tanta mecánica y os permitan disfrutar de vuestro coche con conocimiento, sin sufrir por esa luz intermitente en el tablero de mandos que no sabemos qué nos anuncia.
- Revisión del aceite: Un nivel correcto es clave en el buen funcionamiento del vehículo, así como también, un factor importante para alargar su vida útil. Para medirlo utilizamos la varilla apta para ello, que ya tiene la parte del mango de un color para diferenciarla de la parte que debemos introducir en el depósito. Con el coche en horizontal, motor parado y frío, extraemos la varilla del depósito y la limpiamos para hacer la medición. Volvemos a introducir la varilla y, esta vez ya si, analizamos si la medición es la óptima. Para que el nivel sea correcto, éste tiene que estar entre las dos muescas que sitúan los niveles, mínimo y máximo, recomendables. Si veis que está por debajo, rellenáis el depósito con un aceite de calidad (entre los más recomendados se encuentran los aceites de motor Castrol, pero hay otras marcas que también son muy buenas) hasta llegar al nivel adecuado. En caso contrario, lo mejor es acudir al taller para que retiren el exceso.
- Presión de las ruedas: Una presión no apropiada de los neumáticos incide sobre distintos factores en el manejo de nuestro coche como la durabilidad de éstos, el consumo de carburante o la seguridad durante la conducción. Para comprobarla (se recomienda hacerlo una vez al mes y antes de un viaje largo), no hace falta más que acudir a cualquiera de las estaciones de servicio que tengamos más al alcance y utilizar el manómetro que suele haber a disposición de sus clientes. Desenroscando el tapón de la rueda y colocando la boca del medidor, sabremos la cantidad de bares exacta y, en tal caso, según recomiende el fabricante de nuestras ruedas, sabremos si debemos aumentar o disminuir esa presión.
Espero que estos consejos te ayuden a resolver de la mejor manera algún inconveniente que se pueda presente con el coche.