El tiempo libre es un bien escaso y a veces, desaprovechado. Vamos a darte unos consejos que esperemos te ayuden a verdaderamente a liberarte del estrés y la rutina en la que estamos sumergidos a diario.

Los compromisos nos abruman, muchas veces para llegar a todo, quitamos horas de sueño, de descanso del fin de semana, o incluso las vacaciones. Estamos llegando a un punto en el que el estrés es ya una enfermedad.

John Robinson, un conocido y sabio sociólogo, ha estudiado el comportamiento del ser humano en su tiempo libre, y después de muchas observaciones, nos da algunos consejos que pueden ser muy útiles.

Consejos

Evita las multitareas

Hay que aprender a fragmentar el tiempo por tareas. Aunque nos hemos acostumbrado a ser multitarea gracias a las nuevas tecnologías, esta práctica lo único que provoca es mayor agotamiento mental y mayor sensación de agobio y que no es para nada productiva. Intentando llegar a todo nos convertimos en menos eficientes, porque cada vez tenemos menor capacidad de atención y concentración.

Hay que realizar una lista de tareas

Uno de los pasos fundamentales en toda organización, es realizar una lista de tareas pendientes y darles una prioridad.  Solo con ponerlas por escrito se nos quita la preocupación de la cabeza, y lo que es más importante, gastaremos menos energía en recordar todo lo que tenemos que hacer.

No olvides que el tiempo es finito, así que plantéate objetivos que puedas cumplir de verdad.

La lista de prioridades, te ayudará a empezar por lo más relevante y hará que te centres bien.

Crea rutinas de trabajo sólidas

Éste es un punto clave. Cuanto mayor sea nuestro hábito de trabajo, menos nos costarás hacer las cosas y menos agobiados nos sentiremos ante su desempeño.  Con el tiempo y paciencia, conseguiremos que para realizar ciertas tareas cotidianas apenas necesitemos fuerza de voluntad, se harán como si nada.

El tiempo de descanso respétalo siempre

Para poder rendir a tope, debes respetar los momentos de descanso, tanto por la noche durmiendo las horas necesarias, o durante el día, haciendo un break de vez en cuando.

Si no lo hacemos, lo que conseguiremos es distraernos mucho si llevamos muchas horas con la misma tarea, ser menos eficientes y despistarnos.

Identifica tus momentos más productivos

Cada persona tiene diferentes ritmos para hacer las cosas y para algunos su momento de mayor productividad es a primera hora de la mañana, para otros este momento es de noche.

Así que valdría la pena planificar nuestro tiempo en base a esos momentos de máxima productividad para racionalizar y aprovechar el tiempo de la mejor forma posible. Y así, las tareas que requieran una mayor concentración se harán mejor en esos momentos.

No pospongas las decisiones complejas

Las decisiones difíciles nos atascan y son un continuo quebradero de cabeza, así que merece la pena que te tomes el tiempo necesario en decidir al respecto para decidirte. Si no lo haces, te rondará constantemente la cabeza, y te afectará a la rutina diaria. Si no lo consigues, acude a un especialista que te facilite el dilema.

Ponte tiempo de ocio como, como objetivo o premio

El tiempo libre es necesario, es el momento en el que somos más nosotros. No tiene por qué significar no hacer nada, sino puede ser  para disfrutar de  nuestras aficiones o a tareas que realmente nos encanten.

Y una manera de llevar mejor el día a día es ponernos como meta o recompensa este tiempo para nosotros.

Debemos ser capaces de encontrar tiempo para nosotros, y sobre todo saber aprovechar el que tenemos, ahí está la clave.